No sé, si alguna vez llegaron a ver, el programa de Bob Ross que pasaban los Sábados en la mañana por el canal 11 (espero que si, aun que sea por ociosidad) porque yo era FAN FROM HELL del tipo, su programa forma parte indispensable de mi niñez, de verdad me parecía impresionante la manera en que pintaba y sobretodo la filosofía que tenía.
Yo de verdad me sentaba a verlo pintar y me ponía en actitud de la clásica niña chiquita enfrente del mago que quiere cachar el truco, pues este cuate sacaba un pinche pincelito y empezaba a dibujar "pequeños amigos" (o sea árboles) con unos trazos por aquí y unos cuantos por acá, luego agregaba un poco de "rojo carmesí" y comenzaba a hacer un paisaje y no faltaba que llegaba el momento en el que yo decía -Ahora sí, ya la cajeteó y no lo va a poder arreglar, mira que fea le quedo esa raya- y en dos patadas convertía esa raya en una montaña nevada preciosa, bueno, yo me quedaba con el ojo cuadrado y a la siguiente semana yo ya estaba sentada frente al televisor embobada viendo como pintaba esperando el momento en que por lo menos le temblara la mano al wey y metiera la pata, pero ese día nunca llego.
Después le encontré verdadero gusto a verlo pintar, me di cuenta que me relajaba mucho, no sabía que era realmente lo que me tranquilizaba tanto si la forma en la que pinta
ba, su voz tan pausada o el enjambre que tenía en la cabeza en lugar de cabello, fuera lo que fuera me daban muchas ganas de pintar, así que me compraba pinturas (obviamente no de acrílico, sino vinci) y me ponía a pintar en un cuaderno, pero justo cuando llegaba la parte importante de la pintura, como el mismo Bob la llamaría "el momento de tomar decisiones importantes" siempre me equivocaba, echaba a perder todo el dibujo, me enojaba, me estresaba tenía ganas de meterle el pincel por algún extraño orificio de su cuerpo y de romper el dibujo, (si, si fue muy frustrante para mi, pero no se preocupen ya lo he superado... casi, jeje) y después tomaba aire y decía que de algún modo lo iba a arreglar, eso sucedía solo algunas veces.
Pero lo mejor era cuando Boby (así le decíamos los cuates, jeje) aparecía en pantalla con "una amiga" y sacaba una ardilla se la colocaba en el brazo y empezaba a pintar con el ANIMAL VIVO en el hombro, es decir, la mugrienta ardilla nunca se volvió loca, nunca lo mordió, nunca se fue a parar en el cuadro fresco, ni siquiera lo movía, nada de nada y yo super concentrada y con mis 5 sentidos, no podía hacer que el maldito río se viera real (tiempo después comencé a sospechar que era por la calidad de material que yo compraba).
Bueno, todo esto va a un punto, aquí es donde inicia el DEBRAYE (haciéndole honor al nombre del blog) me puse a pensar y me di cuenta que esos cuadros son como nuestra vida (antes de que empiecen con suposiciones aclaro, que no estoy bajo ninguna influencia extraña, no uso alucinógenos, no estoy bajo los efectos del alcohol o ninguna otra droga) a continuación explicare esta figura mental que armé en mi cabeza, imaginemos que el lienzo en blanco es un día de nuestras vidas y nosotros somos
los pintores, hacemos nuestros primeros trazos en la mañana y con el paso del día todo se va tornando más complicado y va tomando forma de lo que queremos lograr, las pinturas y los colores son las personas con las que convivimos día con día ya sea porque nosotros las elegimos o porque simplemente venían en la paleta con los demás colores, pero a final de cuentas van pintando todos esos momentos bonitos o feos de nuestro día, luego llega el famoso momento de la toma de decisiones, donde muchas veces nos equivocamos y echamos a perder el cuadro, sin embargo también podemos arreglarlo o al menos tener la esperanza de que mañana empezaremos un cuadro nuevo y podremos corregir nuestros errores. Es así como la vida se vuelve una gran galería de los cuadros que hemos realizado y que visitamos constantemente con un boleto llamado "recuerdo".Tal vez sea por eso los cuadros encierran una esencia, algunos nos pueden hacer sentir tristes o nostálgicos, tal vez son como una muestra de un mal día del pintor y otros simplemente nos hacen sentir bien, cuando ponen colores cálidos y transmiten esa sensación de alegría.
Nosotros somos los pintores de nuestro propio día, usemos la creatividad y pasemos un buen rato.
PD - Solo por si se lo preguntaban, si, sigo pintando y no tengo ningún tipo de trauma ni daño patológico, jeje.
PD2 - Les deseo, ¡felices trazos!
ciao!!!
5 comentarios:
Que chido! Ya no me acordaba de Bob Ross y sus trazos felices, pero si tenía esas cualidades que describes. Relajaba, metía un color que desconcertaba para integrarlo a la composición. Creo que fue por el que me obsesiona el trazo de la gente...
locaaaa!!1 ya este mes es tu cumplee!!!
ya urgente q nos veamos!
..oyeme jaaja q onda cn bob ross? es tu mega crush ehhh
jeje tu amor platonico o algo asi jaja
pero razon tienes en todo loq escribist...ese señor si q se inspiraba jeje
comunicate yaaa jeje
atte tu maestra basura
valeriaaa
utilic el mail d otra amiga pero soy yo basura jaja
Por cierto, vi el primer capítulo de Capadocia. Abrieron el canal 460de cablevisión. En efecto se ve prometedora y bien hecha, pero creo que lo principal es la historia.
¡Claro que si! ya me decidí formalmente, me voy a suscribir a tu blog para saber cuando escribes nuevas cosas, y agregaré tu dirección en el mío
Si alguna vez vi a Bob Ross pero siempre me traumé que mis dibujos no fueran tan buenos como los de él, jejeje
A ver si algun nos muestras tus obras de arte "Bobrossianas"
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